“La Guerra de los Cielos” es una de las sagas del universo de Fernando Trujillo y César García. “La Guerra de los Cielos Volumen 1” es el primer volumen de los cuatro que componen la saga completa. Se trata de una saga de fantasía y ficción en la que este volumen 1 no es más que una presentación de la situación y los personajes de esta historia en la que seremos testigos del resurgir de la guerra más antigua y épica de la creación.
“La Guerra de los Cielos Volumen 1” es un libro extenso, pero básicamente preparatorio para el resto de la saga, lo que hace que el inicio se haga incluso un poco lento. Se nos van presentando diferentes tramas, como Raven por un lado, Rick por otro, hasta que esas tramas se entrelazan cada vez más hasta convertirse en una sola, cosa que no sucede hasta el último tercio del libro. Sin embargo, este tipo de historias tan grandes, tan extensas, de tantos personajes y subtramas suelen tener un arrancar lento que permite trabajar la historia, y de esa manera, conseguir un efecto mucho más potente cuando llega el momento verdaderamente importante de la historia. Y esto es lo que ocurre con “La Guerra de los Cielos”. Nos empieza situando en un escenario prácticamente postapocalíptico, en la que un fenómeno llamado la Onda causa estragos en el mundo, y el descubrimiento de su causa es lo que mueve a los primeros personajes a actuar, como es el caso de Rick y Jack Kolby. Por otro lado, tenemos a Raven, un personaje tan misterioso como la Onda, y que está relacionado con ella de alguna manera. Raven es un personaje con el que los lectores empatizamos rápidamente. Está completamente solo, no recuerda nada de su vida, causa rechazo en las demás personas y huye de unos perseguidores que no le dejan en paz. Es un personaje que causa tanta lástima como curiosidad, pues se hace evidente a lo largo de la lectura que él es una pieza fundamental en el misterio de la Onda. Además, protagoniza el momento más duro de la novela con esa desgarradora muerte de la niña Maya, que nos deja destrozados tanto a los lectores como a Raven. Por otro lado tenemos a Rick, víctima del otro momento más duro de este primer volumen, la masacre de sus compañeros en su misión, y a Jack Kolby, dos personajes con personalidades muy distintas pero que en el fondo persiguen el mismo objetivo: descubrir cuál es el misterio de la Onda, la Niebla y los portales a ese misterioso nuevo mundo.
La presentación de este universo nos hace sumergirnos por completo en ese mundo postapocalíptico en el que el clima del planeta ha cambiado tras ese extraño fenómeno de la Onda, en el que aprendemos a temer tanto como los supervivientes esos bancos inmóviles de Niebla de los que nunca nadie ha regresado y en el que no podemos dejar de preguntarnos cuál es ese aterrador mundo al que conduce el portal del que solo han conseguido regresar dos supervivientes de cien soldados tan sólo diez minutos después de atravesarlo.
Sin embargo, y a pesar de que estos extraños hechos captan la atención del lector, a medida que avanza la historia nos encontramos con otro tipo de personaje. Unos personajes que están seguros de sí mismos y sí que parecen saber lo que hacen, como Nilia o los perseguidores de Raven. A medida que avanza la trama, nos damos cuenta de que hay dos bandos, y aunque se puede intuir, no es hasta la mitad de la lectura cuando se nos confirma que esos dos bandos son de ángeles y de demonios. Ángeles y demonios de verdad, con sus alas, su inmortalidad y el poder que se atribuye a estos seres. Y entonces toda la lectura adquiere una profundidad diferente. Ya no sólo tenemos interés por el misterio de la Onda, la Niebla y los portales, sino que la atención ahora se focaliza en los movimientos de ambos bandos y la inminente guerra que es obvio que va a haber.
Es una temática fascinante. Nunca antes habíamos visto o leído una historia que fuera, literalmente, de la guerra entre ángeles y demonios. Sí, existe alguna película (no muy buena), y aunque no conozco ningún libro sobre este tema, seguramente existirá, pero no hay ninguna historia conocida que trate tan claramente, con tanta extensión y tanta profundidad una guerra entre ángeles y demonios de manera literal, y eso es lo que hace a esta saga tan especial y original.
Tan original como la temática en sí es la representación de todo lo que uno relaciona con ángeles y demonios. El Nido como la representación del Cielo es absolutamente original. Un lugar sin sombras, con sus esferas, sus conductos para trasladarse de una esfera a otra, su Ciudadela, edificios que levitan, un observatorio desde el que los ángeles observan los humanos, o como ellos los llaman, los Menores, y por supuesto, la figura de Dios, a la que llaman el Viejo, y que misteriosamente está desaparecida. De igual manera, tenemos a los demonios, que han estado en el Agujero, la representación del Infierno, donde se les han oscurecido las alas, y donde han estado atrapados desde que perdieron la primera guerra por rebelarse contra el Viejo hasta que han conseguido salir gracias a la Onda. No tenemos en este volumen una descripción del Agujero como sí la tenemos del Nido, pero nos dejan entrever que es un lugar horrible, del que se han traído algunas bestias como perros y gigantes de piedra. Aunque todos tenemos en la cabeza la imagen del Infierno como el típico lugar lleno de lava y fuego, el Nido tampoco está representado como ese lugar de nubes en el que los ángeles tocan el arpa, por lo que es de esperar que el Agujero sea un lugar tan original como el Nido. Al igual que el Viejo, el líder de los demonios, Satán, aquí denominado como el Favorito, también ha desaparecido, lo que se suma a la lista de misterios de esta saga, al igual que el hecho de que estos seres hayan perdido la facultad de volar. Pero mientras que los ángeles esperan fielmente la llegada del Viejo, los demonios se están movilizando por su cuenta y trabando un plan para atacar por sorpresa a sus antiguos hermanos.
Dicho plan consiste en crear su propio portal construyendo cinco rascacielos en puntos estratégicos de la ciudad de Londres, esos edificios que Rick estuvo investigando a petición de Jack Kolby. Los estupefactos Menores londinenses son testigos de cómo un enorme ejército de demonios atraviesa el portal para atacar a unos ángeles que, como ya sabemos, ni se esperan el ataque ni están preparados para ello a pesar de las advertencias de Asius.
La organización tanto de ángeles como demonios también resulta muy curiosa. Mientras que los ángeles se organizan en la jerarquía de tres Justos, Consejeros y Custodios, y los demás ángeles tienen cada uno su función, como Observador o Sanador, los demonios se organizan en siete clanes liderados por siete Barones. Unos Barones con mucho carácter a los que se les nota que les ha costado dejar atrás sus diferencias para ponerse de acuerdo para la guerra.
A pesar de ser seres sobrenaturales, no se representa en esta novela a los ángeles o los demonios como los seres perfectos que todos tenemos en mente. Personajes de ambos bandos demuestran tener características y defectos muy humanos como soberbia, ira, violencia o arrogancia, lo que aporta realidad y credibilidad a estos personajes. Aun así, también hay ángeles y demonios que demuestran más sensatez e inteligencia, como Asius, Still y Nilia.
Precisamente, los personajes en sí son uno de los puntos fuertes de esta novela. Aparte de Rick, Jack Kolby o Raven, tenemos a personajes estupendos muy bien definidos por parte de los ángeles, como el impulsivo Vyns, el astuto Asius o el enigmático Yala, y también por parte de los demonios, como la letal Nilia, el inteligente Still, el poderoso Tanon o el teatral Capa. Son unos personajes con una personalidad muy definida para cada uno, que se ganan a los lectores con tan sólo este primer volumen, que hacen que nos enganchemos a ellos y que darán mucho juego a lo largo de la saga.
A pesar de que la atención inicial se centra en los ángeles y los demonios, no podemos olvidar que también están los Menores de por medio, que se verán afectados por esa guerra que no va con ellos. Y, por otro lado, no solo hay ángeles y demonios, también existen los neutrales, ángeles que se pusieron de parte de los demonios en la primera guerra pero que, al no estar de acuerdo con sus formas, no tomaron parte en el enfrentamiento. Estos diferentes tipos de personajes hacen que la historia adquiera más profundidad de lo que parecía en un principio.
De la misma manera, y aunque la trama se pueda resumir en la guerra de ángeles y demonios, esto no es tan simple como parece. El hecho de que los Menores y los neutrales estén por medio hace que adquiera complejidad. Pero la historia tampoco se limita a que los buenos sean los ángeles y los malos sean los demonios, como podría esperarse. Al menos por ahora, no hay un bando bueno y un bando malo, sino que ambos bandos persiguen sus intereses. Los ángeles se mantuvieron fieles al Viejo, pero los demonios no estaban de acuerdo con la autoridad marcada por él, y lo que les llevó a iniciar una guerra fue la negativa del Viejo a cuestionar su propia autoridad y decisiones. Tanto es así que Capa lo llega a definir de dictador. Esto es algo que hace reflexionar sobre los motivos que llevaron a los demonios a rebelarse y a que los lectores podamos comprender sus actos, dando un interés casi político a la lectura muy interesante.
La sorpresa final nos la da Jack Kolby, que ha estado aliado no sabemos si con un ángel o un demonio, pues no se nos especifica el color de sus alas. Aunque más que aliado, parece que Pit esté a las órdenes de Jack. ¿Desde cuándo Jack está al tanto de la existencia de los ángeles y los demonios? ¿Cuánto sabe realmente este personaje?
De esta manera, el primer volumen termina justo cuando lo interesante va a comenzar, lo que nos deja con las ganas inmediatas de comenzar el segundo volumen y descubrir cómo afrontarán los ángeles el ataque de los demonios, qué pasará con Raven, Rick y los demás personajes al internarse en la Niebla, cómo es posible que un menor como Jack Kolby esté aliado con Pit, y hallar las respuestas a los misterios de la Onda.
El primer volumen de “La Guerra de los Cielos” ha sido una preparación para ese épico momento en el que el ejército de demonios atraviesa el portal. Se viene la guerra. Sí, va a haber peleas, espadazos, luchas, estrategias, sangre y muertes. Y va a ser la leche.
CONEXIÓN CON OTROS LIBROS
En este primer volumen de “La Guerra de los Cielos” podemos hallar referencias a estas otras novelas.
El Secreto de Tedd y Todd
El primer capítulo de “La Guerra de los Cielos” empieza prácticamente idéntico al momento en el que a Ramsey le suena el móvil durante el funeral. Sin embargo, en esta saga comprendemos por qué Ramsey mira al cielo con ojos desorbitados, pues los hechos que ocurren a continuación son diferentes a los que ocurren en “El Secreto de Tedd y Todd”. Además, no es el único libro en el que Ramsey interrumpe un funeral porque le suena el móvil con una canción de rock. Este hecho y este personaje son unos de los mayores misterios del universo de estos libros.
Sin embargo, hay una gran diferencia en esta escena entre los dos libros, pues en “El Secreto de Tedd y Todd”, a pesar de la reacción de Ramsey, todo ocurre con normalidad pasado este momento, mientras que en “La Guerra de los Cielos” ocurren todas las consecuencias de la Onda. Entonces, hay dos conclusiones posibles: o bien son dos líneas temporales diferentes o bien son funerales y momentos completamente diferentes a pesar de la similitud de la reacción de Ramsey.
Por otro lado, aparecen Mike y Steven, que son los personajes que se dedicaban a arreglar el reloj del Big Ben cada vez que se estropeaba en “El Secreto de Tedd y Todd”, y que en este primer volumen de “La Guerra de los Cielos” se dedican a buscar telio de forma ilegal para intentar mantener a sus familias, encontrando así a Raven.
Además, el color de ojos violeta era característico de Tedd y Todd, pero resulta que en esta saga hay un personaje, Sirian, con los ojos violetas también.
La Última Jugada
La sombra de la pequeña, que en realidad es la Muerte, va en sentido contrario a las demás, es decir, hacia la luz. En “La Guerra de los Cielos”, como ya hemos visto las sombras son algo muy particular, pero por su ausencia, no por su cambio de sentido. Quizá no haya relación entre ambas novelas, pero todo esto deja claro que las sombras son un elemento clave del Universo Trujillo.
Por otro lado, también resulta curiosa la similitud entre esos perros que los demonios traen del infierno y que atacan al grupo de ángeles con el perro Zeta de este libro que acompaña a la niña. La descripción es prácticamente la misma, perros enormes y negros con aspecto feroz.
Sal de mis Sueños
En su cuarto sueño, Óscar se encuentra en el Nido, mientras observa una pelea entre el ángel Yala y la demonio Nilia. Sin embargo, esta lucha no aparece en este primer volumen de la saga. Veremos si aparece en los siguientes.
La Biblia de los Caídos
Lo que más llama la atención es lo diferentes que son los demonios en ambas sagas. Mientras que en “La Guerra de los Cielos” los demonios son ángeles caídos, con forma humana y alas negras, en “La Biblia de los Caídos” los demonios son esos seres monstruosos que todos relacionamos con el Infierno, que poseen y devoran a humanos y que tienen voces sobrenaturales, graves y aterradoras, como en cualquier película de terror. Está claro que cada saga nombra como demonios a seres diferentes.
Por otro lado, otra relación es que uno de los libros de “La Biblia de los Caídos” es el “Testamento de Nilia”, personaje de “La Guerra de los Cielos”.
Asimismo, se aclara que los perros negros que tienen los magos son en realidad hombres lobo, y no Sombras.
La Prisión de Black Rock
Además, la niebla es algo muy importante y característico también de esta saga. Pero es una niebla diferente a la de “La Guerra de los Cielos”. Al igual que las sombras, la niebla también es un elemento clave en el Universo Trujillo.
Por otro lado, el negro gigante que aparece en este primer volumen de “La Guerra de los Cielos” aparece también en este primer volumen de “La Prisión de Black Rock”.
También resulta curiosa la similitud entre esos perros que los demonios traen del infierno y que atacan al grupo de ángeles con el perro Zeta de esta saga que acompaña al niño rubio. La descripción es prácticamente la misma, perros enormes y negros con aspecto feroz.
Otro guiño de este primer volumen de “La Guerra de los Cielos” hacia esta saga ocurre cuando Jack Kolby le da dinero a un ciego que va con su mujer, asegurando que siente debilidad por las personas con problemas de visión y que comprende perfectamente por lo que está pasando. Sin duda le recordó a sus tiempos como alcaide en Black Rock.
También en ese avión viajaban Nelson y Rylan de niños, y que aparecen como científicos en este primer volumen de la saga.
La escena final de “La Prisión de Black Rock” en la que hay colores en el cielo y los seres vivos quedan congelados es el fenómeno de la Onda, con el que empieza “La Guerra de los Cielos”. Por tanto, ese funeral en el que está Ramsey al principio de este primer volumen es el funeral de Wade. Entonces, ¿Fueron Tedd y Todd los responsables de la Onda?
Otro detalle importante es que al final de este volumen 8 de Black Rock, cuando Stewart se precipita al agujero detrás de Tedd y Todd, aparece sin la barba y se especifica que su nariz es prominente… la misma descripción que en este volumen de “La Guerra de los Cielos” se hace de Raven. ¿Es el mismo personaje?
Hay otro guiño cuando Susan dice que Jack Kolby empezó su fortuna en los tiempos anteriores a la Onda, y que la consiguió jugando al póquer.
Gracias por todos estos resúmenes! A veces me enredo entre tanto persona e historias, y tus análisis siempre me salvan de algún mal entendido.
Ya he leído bastante del universo e Fernando (audio escuchado en verdad, en audible). Buenísimas todas las historias, y está en particular me llama mucho la atención. Si parte algo flojo, pero conociendo al escritor, uno sabe que tarde o temprano despega.
Gracias por tus análisis nuevamente! Buscaré el del tomo 2 de esta saga cuando lo termine 😉
¡Hola Eduardo!
¡Muchas gracias a ti por tus palabras! Me alegra muchísimo que los análisis te sean útiles 🙂
Ya verás cómo esta historia también despega. Este autor no defrauda.
¡Gracias por tu comentario! Espero que disfrutes mucho del tomo 2.
Un abrazo.
será posible que Tedd y Todd sean el viejo y el favorito?
¡Hola Danilo!
Es una teoría muy interesante, más gente piensa también así. ¡Podría ser perfectamente!
Quién sabe… Toca esperar a ver si en los próximos tomos de este universo descubrimos algo más.
¡Saludos!