Película Harry Potter y La Cámara Secreta, de Chris Columbus

Afortunadamente, esta segunda película de Harry Potter sigue los pasos de su predecesora, siendo tan fiel al libro y estando tan bien adaptada como ésta. Una vez más, nos parece leer el libro en imágenes, se da importancia a los momentos clave y se subestiman escenas que aportan menos a la trama, todo ello manteniendo ese cuidado por los detalles que ya vimos en “Harry Potter y La Piedra Filosofal”, al igual que la mágica ambientación, y engrandeciendo el libro en todo momento.

 SPOILERS

Los Dursley siguen estando fantásticos, se resume muy bien la preparación de la importante cena que van a mantener con sus invitados y cómo siguen tratando a Harry con desprecio, pero sin perder su toque cómico.

El personaje que realmente se come la pantalla en estos primeros minutos de cinta es sin duda nuestro querido elfo doméstico. Dobby está tan bien representado, tanto en el aspecto físico (esos ojos como pelotas de tenis) como en la personalidad, que parece sacado directamente del libro, consiguiendo ser igual de desconcertante y divertido.

 

Tras la advertencia de Dobby llegamos a La Madriguera, que nos presentan de la misma manera que el libro, acogedora y desordenada y con pinta de caerse en el exterior. A pesar de los detalles que nos muestran, como el reloj (errata de la peli: uno de los lugares que aparecen en el reloj es el dentista… ¡los magos no tienen dentistas!) o la sartén lavándose sola, no nos enseñan mucho el interior de la casa de Ron, como su cuarto, los pisos de la casa, el jardín o el ático habitado por el espíritu, aunque, como todos los demás personajes de la saga, el personaje de Arthur Weasley está bien caracterizado, y me gusta que nos transmitan su inquietud por el mundo muggle. Por ponerle una pega a la escena, quizá falte un poco más de bronca por parte de la madre de Ron hacia sus hijos, pues el enfado de la peli no tiene nada que ver con el del libro.

Tras un breve vistazo al Callejón Knockturn al que vamos a parar con unos geniales polvos flu, que resulta igual de tenebroso, llegamos al Callejón Diagon, donde encontramos a Gilderoy Lockhart, derrochando carisma, con una personalidad que enmarca perfectamente al personaje del libro, al igual que Lucius Malfoy. Excelente el detalle de que lleve el pelo largo, que no se menciona en el libro, y la interpretación del actor. Por cierto, otra errata de la peli y que se repite de la primera: Hermione no puede arreglar las gafas a Harry ni en el Callejón Diagon ni en el tren en la primera peli, ¡no pueden hacer magia fuera del colegio!

Y así acabamos volando hacia Hogwarts en el coche volador. El viaje se hace un poco más espectacular en la película, lo cual es normal y está bien. Llegamos a Hogwarts y una vez más nos ponen la espectacular imagen del castillo con la maravillosa banda sonora, esta vez con el coche volador, que acaba estrellándose contra el sauce boxeador, escena fabulosa en la que el árbol comienza a aporrear el coche y el vehículo acaba hecho añicos y huyendo hacia el bosque prohibido.

 

Si os fijáis hay una parte donde Nick Casi Decapitado saluda a Percy y a la chica que va con él, la señorita Clearwater, un guiño al libro.

Las posteriores escenas son clavadas al libro. Las mandrágoras y sus raíces con forma de bebés, sus chillidos, y los duendecillos de Cornualles de Lockhart encarnan a la perfección la esencia de la novela. Si hasta cogen a Neville por las orejas y lo cuelgan de la lámpara, tal y como se describe…

 

La escena de las babosas de Ron no está mal, pero hay una cosa que no me gusta. ¿Por qué nadie del equipo de Gryffindor se lanza a por Malfoy cuando llama a Hermione sangre sucia? En el libro se lo iban a comer y tuvieron que protegerlo los de Slytherin, pero en la peli todo el mundo se queda parado, lo que hace que la escena pierda vida y quede un poco sosa.

Se suprime la fiesta de cumpleaños de muerte de Nick Casi Decapitado y se nos presenta directamente el misterio del libro, la Cámara Secreta, con el mensaje en la pared y el resto de los alumnos pillando en el pasillo a Harry, Ron y Hermione, con la señora Norris petrificada, y la peli va adquiriendo esa intriga y ese misterio que caracteriza al libro.

El partido de quiddich es tan espectacular como el anterior, esta vez con la bludger loca, y mejor aún que como transcurre en el libro, más emocionante.

 

Tras una nueva visita de Dobby y otra petrificación, llega el club de duelo, algo diferente a como transcurre en la novela, pero mucho mejor para la película, pues consigue trasmitir el combate de Harry y Draco como algo mucho más personal entre ambos, con el posterior descubrimiento de que Harry habla pársel. Genial cómo han conseguido plasmar el idioma pársel en la película, con tantos siseos, y cómo consigue que entendamos que nuestro protagonista no comprenda cómo han reaccionado todos.

 

Estupenda también la escena de la poción multijugos, Myrtle La Llorona, cómo Harry y Ron se cuelan en la sala común de Slytherin y la pobre Hermione acaba con cara de gato.

Encontramos el diario de Tom Ryddle y el misterio se va consolidando cada vez más. La forma en que Harry se introduce en el diario y la posterior escena no podrían estar mejor. Una vez en el bosque prohibido la parte de las arañas es realmente agobiante, y llevada muy fielmente a la pantalla.

 

Finalmente, por fin entramos en la Cámara Secreta, y la película nos ofrece un final épico aún mejor que el del libro. Magistral la manera en la que se abre el lavabo para dar entrada a la Cámara, la sala con las estatuas de las serpientes y, cómo no, el espectacular monstruo de Slytherin.

 

Buah, menudo bicharraco. Ni siquiera leyendo el libro me lo podía imaginar tan grande y aterrador. La película engrandece el final del libro, sacándole el máximo partido posible, haciéndolo épico e impresionante y reforzando a Harry como héroe.

Ginny se despierta, y me falta un poco más de vida por su parte. Ni se pone a llorar, ni siquiera parece asustada, y no me convence.

Pero por lo demás, todo bien. Se nos van dando esas pinceladas que aparecen en el libro sobre esa conexión entre Harry y Voldemort, sin dejarse nada, y me gusta que se incluya al final que los dueños de Dobby son los Malfoy y que Harry haga que el señor Malfoy lo libere sin querer. Sin embargo, la escena final con Hagrid, aunque entrañable, me resulta demasiado azucarada, y aunque no hay duda de que el personaje de Hagrid merece ese final creo que se exagera y se alarga demasiado.

Aparte de los detalles (la mayoría de ellos sin importancia) que he ido comentando y que fallan un poco, todo lo demás es perfecto, al igual que en la primera película. Una trama redonda, una ambientación y banda sonora maravillosas, una adaptación buenísima, una vez más fiel y respetuosa con la novela, a la que el director y guionistas han sabido llevar a la gran pantalla de manera magistral.

VALORACIÓN DE LA ADAPTACIÓN: 10/10
 

—Oye, Todd, esta persona ha leído la entrada y no ha publicado ningún comentario.

—Espera un poco, Tedd. Dale tiempo para que pueda escribirlo.

—No escribe nada, Todd. Que le haya gustado y no nos lo diga me pone de mal humor.

—Tranquilízate, Tedd. No es bueno para tu salud que te estreses.

—De acuerdo, Todd. Pero acuérdate de decirle que no incluya spoilers de otros libros en los comentarios de esta entrada.

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